Chile alberga casi el 80% de masas de hielo en Sudamérica, donde se calcula que existen 20 mil km2 de glaciares, sin embargo, estos enormes témpanos se encuentran en un gran peligro. Esto se debe al derretimiento prematuro y acelerado efectuado por el cambio climático.
Según datos del proyecto República Glaciar, que tienen como objetivo estudiar y difundir la importancia de nuestros glaciares, comentan que estas masas de hielo: “se crean tras la acumulación y compactación de la nieve de las montañas que son de mucha altura y también de las regiones más frías que producen nieve más cercana a nivel de piso.” Por lo que las condiciones en la que los glaciares nacen y crecen son muy específicas.
Los glaciares se clasifican de acuerdo a su forma, donde se encuentren, su estructura y condiciones térmicas. Se concentran en su mayoría en el sur de Chile, también existen en menor cantidad en la zona central cercano a lugares cálidos como Valparaíso y Santiago.
Importancia de los glaciares
Los glaciólogos Doctor Rodrigo Soteres y Doctor Hans Fernández, ambos de la Fundación Glaciares Chilenos, comentaron acerca del complejo momento que viven los glaciares y de su importancia clave en el ecosistema hídrico chileno: “En conjunto, los glaciares andinos contribuyen a regular el clima local y regional y constituyen una etapa fundamental del ciclo hidrológico, sobre todo como reservorios de agua dulce y moduladores del régimen de caudal de los ríos”, detallan.
Sin embargo, está presente la preocupación de la amenaza que ejerce el cambio climático y que afecta de manera directa al retroceso de estos glaciares. El científico Rodrigo Soteres comenta qué: “Gracias al análisis de imágenes satelitales sabemos que la abrumadora mayoría de los glaciares chilenos están perdiendo masa desde mediados del siglo XX y, particularmente, durante las últimas décadas”.
Un ejemplo de lo anteriormente mencionado es el glaciar andino Echaurren Norte, ubicado en el embalse de El Yeso ya que observaciones directas muestran que este glaciar ha perdido una gran cantidad de masa desde los años 90´.
Estas masas de hielo son esenciales para la salud y el equilibrio del planeta, además son espacios únicos de belleza natural.
Asimismo, tienen un rol e impacto en la industria del turismo y fomenta la creación de espacios naturales protegidos, mientras que los glaciares del centro y norte del país son fundamentales para asegurar el aprovisionamiento de agua potable para la población y muchas actividades productivas básicas como la agricultura.
Son diversos los glaciares que existen a lo largo de nuestro país y es importante conocerlos, así que aquí presentamos algunos.
Glaciar El Morado
Ubicado a tan solo 124 kilómetros de Santiago, específicamente en el Cajón del Maipo se encuentra sobre 1.750 metros sobre el nivel del mar y sus paredes alcanzan hasta los 30 metros. Su entrada es a través del cerro El Morado, pero su acceso es complicado ya que en inviernos, debido a las temperaturas bajas y condiciones complejas, se hace difícil su visita.
Los glaciares del Cajón del Maipo cumplen funciones cruciales, ya que favorecen que los ríos mantengan su caudal en periodos de sequía, ayudan a la existencia de ecosistemas como los humedales alto andinos y constituyen un insumo de gran importancia para fomentar la actividad educativa, científica y turística, además, de ser un elemento central en la cultura de montaña de los Andes.
Glaciar O’Higgins
También conocido como el Ventisquero grande, lo caracteriza su intenso color turquesa y es el cuarto glaciar más grande de toda la Patagonia. Con una superficie de 828 km2 y se encuentra en el lago binacional O’Higgins con sus islas desiertas, otros glaciares, cuencas y canales.
Este glaciar es uno de los más importantes y simbólicos del país, sin embargo, ha retrocedido cerca de 15 kilómetros en los últimos 100 años, esto según expertos confirma el acelerado derretimiento que el calentamiento global está ocasionando.
Glaciar San Rafael
Es uno de los mayores glaciares de los campos de Hielo Norte, ubicado en la Patagonia de Aysén, siendo parte del Parque Nacional Laguna San Rafael, reconocido por la UNESCO como una Reserva Natural de la Biósfera.
Esta gran masa de hielo tiene más de 30 mil años de antigüedad, mide más de 2 kilómetros de ancho y 20 kilómetros de largo siendo así uno de los glaciares más grandes de Chile.